La Reforma Pensional: Un logro para el Gobierno que puede terminar en debacle.
La reforma pensional fue aprobada en la Cámara de Representantes el viernes pasado, lo que constituye un logro importante para el Gobierno Petro. Pero la celebración puede derivar en una debacle para el ejecutivo. Apenas el Presidente proceda a sancionar el articulado como ley, la Corte Constitucional pasará a revisar el mecanismo mediante el cual fue aprobado. Las múltiples demandas que se avecinan en su contra, no parecen beneficiar el proyecto del gobierno del cambio.
El viernes 14 de junio, en la Cámara de Representantes, se llevaba a cabo uno de los debates finales en busca de la aprobación de la reforma pensional. El Gobierno no tenía tiempo que perder y los ministros hacían fuerza para que la sesión se desempeñara con diligencia, había preocupación en cuanto a los tiempos que tenía el articulado para ser aprobado. El 20 de junio era la fecha límite para que la reforma pasara, si no se hundiría y fracasaría así un proyecto más del Presidente, que no ha logrado sacar adelante sus principales propuestas.
Pero los ministros encargados por Petro y presentes en el recinto, no permitirían el fracaso del proyecto. Alrededor de las 5:30 de la tarde, cuando la discusión parecía estancarse, se presentaba ante la mesa directiva una proposición, respaldada por 20 representantes, con el fin de terminar el debate y aprobar la reforma pensional acogiendo el articulado aprobado por el Senado. La petición fue respaldada por congresistas del Pacto Histórico, Alianza Verde, Curul de Paz, Comunes y Conservadores.
La votación fue determinante: 88 votos a favor y 20 votos en contra, daban vida a la reforma pensional que de darse el visto bueno por parte de la Corte Constitucional, entrará en vigencia a mediados de 2025.
Si quiere conocer los principales cambios que trae la reforma pensional lea:
El mecanismo utilizado para su aprobación fue dudoso y tanto partidos políticos, como expertos constitucionalistas reprochan lo ocurrido en el Congreso. El afán del Gobierno puede jugarles en contra y es necesario hacerse una pregunta: ¿Qué pasará cuando la Corte Constitucional entre a revisar lo que ocurrió en la votación de la Cámara de Representantes?
Las reacciones por parte de los partidos políticos de oposición y de los constitucionalistas no se dieron a esperar. Los partidos de oposición, junto con algunos congresistas independientes, compartieron su preocupación por la falta de debate y “la jugadita”que llevó a la aprobación de la reforma. Mientras que los constitucionalistas, han explicado porque es muy probable que la Corte tumbe el proyecto pensional. Sin embargo, ha surgido una preocupación y es la próxima terna de magistrados que podrá presentar el Presidente, lo que podría favorecer al Gobierno en las decisiones de la Corte Constitucional.
El Centro Democratico fue el primer partido en pronunciarse y el representante Juan Espinal aseguró que presentaran “demandas de inconstitucionalidad ante la Corte Constitucional” y defenderán hasta el último minuto “los recursos de las pensiones de los colombianos”.
Además de las demandas que se preparan en contra del articulado, los políticos de la oposición han recalcado que la aprobación de la reforma y la utilización que se le darán a los ahorros de los colombianos están directamente relacionados con las elecciones del 2026.
El representante Espinal dijo que no permitirán que el Gobierno de Gustavo Petro “se apropie de 460 billones que es el ahorro de más de 16 millones de colombianos para que hagan politiquería en el año 2026”. Mientras que el senador David Luna de Cambio Radical, le tiró un dardo a los representantes que ayudaron a que se aprobara el proyecto de pensiones. “Nunca olvidaremos cómo algunos representantes de los partidos Liberal, La U y Conservador prefirieron pensar en las próximas elecciones y no en las próximas generaciones”, escribió Luna a través de su cuenta de X.
Los políticos no son los únicos en contra de la manera en como se aprobó la reforma, los constitucionalistas y expertos en la materia han compartido su preocupación a través de varios medios.
El exmagistrado Luis Guillermo Guerrero, habló con la Revista Semana y explicó tres panoramas que la reforma pensional podría afrontar en la Corte Constitucional.
En caso de que la Corte acepte la reforma, deberá examinar “cómo ocurrió la sesión” y determinar que “hubo oportunidad para el debate y para votar”, pero “yo lo veo difícil por la manera como ocurrió”.
Guerrero piensa que “es complejo pensar que en relación con todo un articulado no había ninguna observación, ninguna sugerencia, ninguna discrepancia en la Cámara y que no aprobaron simplemente lo del Senado”. Bajo este supuesto la Corte podría declarar la ley inexequible y determinar que fue aprobada de manera inconstitucional.
El tercer escenario versa sobre si los vicios en la aprobación de la reforma son subsanables. Sí sí lo son teóricamente el proyecto debería volver al Congreso para que se realice el debido proceso, para que posteriormente vuelva a la Corte y ésta verifique que se corrigieron los vicios. Sin embargo, el jurista aclaró que “este proyecto debía estar aprobado antes del 20 de junio y, por lo tanto, ya no cabría subsanar el vicio”. En parte esto se da porque el trámite del proyecto solo puede darse en dos legislaturas, las cuales ya cumplió, por lo cual no podría regresar por tercera vez al Congreso.
Por su lado el abogado Lisandro Junco, Director de la Dian en el Gobierno Duque, considera que la reforma pensional es “inconstitucional” y la Corte ha tumbado proyectos por las mismas razones. En conversación con El Tiempo, Junco asegura que la sentencia de la Corte Constitucional C-222 de 1997, establece que debe haber debate en el legislativo para darse deliberación. “Se omitió la exposición de ideas, la confrontación seria y respetuosa y la discusión sobre los efectos fiscales que va a dejar esta reforma pensional. La reforma carece de validez”, aseguró el exdirector de la Dian.
El último punto de preocupación, que se dice podría salvar al Gobierno de la debacle sería la elección de cuatro nuevos magistrados para la Corte Constitucional. Esta designación se dará en la segunda legislatura de este año en el Senado de la República.
Actualmente el Presidente cuenta con tres votos favorables dentro de la Corte, pero él es el encargado de ternar a uno de los cuatro magistrados que serán elegidos, lo que se traduce en 4 votos favorables para el Gobierno. Ahora, para lograr una mayoría se necesitan 5 votos favorables, porque la Corte Constitucional está conformada por 9 magistrados. Las ternas para la elección de los demás magistrados las presentarán la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado. Si el Presidente recoge esa mayoría sería más difícil que las reformas se caigan y ponerle límites a los proyectos del Gobierno, como lo es la constituyente.
El expresidente Iván Duque a dicho que de lograr las mayorías en la Corte, Petro tendría a su disposición “un mecanismo atípico para violentar la Constitución”
La mayoría de sectores concuerdan en que la reforma pensional es abiertamente inconstitucional y que el “pupitrazo” que se dio para su aprobación va en detrimento de la democracia. La Corte Constitucional tendrá la última palabra, pero se espera que el ente judicial determine la inexequibilidad del proyecto. Esta es una jugada en contra de la democracia, que no representa ni a los votantes de Petro y mucho menos a los que no están de acuerdo con las ideas del mandatario. Una reforma tan importante como lo es la pensional, debe tener todas las garantías en el ente legislativo, para que se dé un debate de forma equitativa y transparente. El Presidente y su séquito celebran la “aprobación” de la reforma, pero esa felicidad les puede durar poco, porque la Corte ha demostrado ser un contrapeso serio contra los inventos del Gobierno. Esperemos que una vez más demuestre ser una institución sólida, que no le permite al Presidente poner en marcha proyectos improvisados y sin fundamentos.